
Sí, porque si hasta ahora se nos resistía Lleida, la única capital catalana donde aún no estábamos, desde esta semana ya podemos decir con orgullo que eso ha pasado a formar parte de la historia. Porque ya es posible degustar nuestros pinchos en Barcelona, en Tarragona, en Girona y en Lleida. La extensión de Lizarran por las cuatro provincias explica por qué Cataluña es una de las comunidades donde más gustan nuestros pinchos. Un reconocimiento que nos reafirma y renueva nuestro compromiso con el trabajo duro, con ofrecer a nuestros clientes la mejor calidad cada vez que nos visitan. Como pueden comprobar desde ya los vecinos de la calle Torres de Sanui, 24, de Lleida.




