
Si hace poco os contábamos cómo nos querían en Chile, ahora hablamos de otros importantísimo país hispanoamericano que abre sus puertas de par en par a Lizarran. Ya contábamos con dos locales en México, concretamente en Puebla. Y su éxito ha sido tan grande que Prissa, la empresa que ejerce como máster franquiciado, y que es la mayor importadora mexicana de vinos, ha decidido comprar los derechos para todo el país. Como consecuencia, 26 nuevos Lizarran irán abriendo sus puertas en el país azteca. México DF, Querétaro, Guadalajara y Veracruz serán las primeras en sumarse a la lista.
Además, Prissa procederá a abrir nuevos locales en régimen de cobranding dentro de su actual cadena de tiendas. Una segunda etapa del plan de expansión prevé llevar la marca a Puerto Vallarta, Cancún, Acapulco, San Luis Potosí, Guerrero, Michoacán, Sinaloa y Baja California.
Estas aperturas suponen un paso muy importante en el refuerzo de la presencia de Lizarran en Latinoamérica, uno de los objetivos de cara a este año, en que la marca cumple 15 años de vida. México, así, no sólo se suma a Chile, donde en agosto abrirá sus puertas el tercer local, preludio de una cadena de aperturas que alcanzarán la veintena en 2014, sino también a Brasil (con 30 locales en dos años), República Dominicana, Perú y Argentina. Una actividad que tiene correspondencia con otras partes del mundo, como Europa (con un próximo desembarco en los países bálticos), Asia (Qatar, Japón, India…), África (Guinea Ecuatorial y Egipto, entre otros) y el resto de América (Estados Unidos, Canadá…).





