Que nuestros franquiciados son gente inquieta y con ideas ya os lo hemos demostrado con creces en este blog. Pero la verdad es que no dejan de sorprendernos. Hoy os traemos dos iniciativas que les han puesto en primera línea de la actualidad de sus poblaciones. En primer lugar, el Lizarran de Cáceres fue uno de los impulsores, el pasado viernes 20, de una iniciativa solidaria de las que dejan huella, la confección de un superbocadillo gigante que recorrió toda la calle Moret, en la que se encuentra. Un bocadillo lleno de cifras récord, de las que bastan dos para dejarnos con la boca abierta: 180 barras de pan y 60 kilos de morcilla «patatera». Y todo, por una de las mejores razones: recaudar fondos para el Banco de Alimentos, algo que consiguieron con creces, porque el gigantesco tentempié desapareció rápidamente de la vista de todos. Fue otro éxito de la plataforma «Moret se mueve», constituida por el resturante Corregidor, el hotel Alfonso IX y Lizarran Cáceres.

Otro Lizarran, el de Teruel, participó en otra iniciativa para promocionar el jamón de esa tierra y, de paso, promover la ciudad como destino de turismo científico gracias a sus yacimientos paleontológicos, especialmente de dinosaurios. Una de sus propuestas, la «Lizarrasaurus rex», quedó finalista de La Tapa Más Sauria, uno de los certámenes que conforman el programa del X Concurso de Tapas Jamón de Teruel, que tuvo lugar del 12 al 22 de septiembre. Un delicioso bocado que demuestra que, si algo no les falta a nuestros franquiciados, es creatividad e imaginación. Por eso, en Lizarran somos como somos.